martes, 14 de enero de 2014

¡¡Quiero un trabajo decente!!-II


El concepto atiende tanto a cuestiones laborales como extra laborales precisamente porque la meta de fondo es que mejoren las condiciones de vida de todas las personas.

Siguiendo la definición de la OIT, las dimensiones del Trabajo Decente, se refieren a:

•   Oportunidades de trabajo productivo: expresa la necesidad de que todas las personas que quieren trabajar puedan efectivamente encontrar un empleo dependiente o independiente que les permita alcanzar un nivel de bienestar aceptable.

•   Trabajo en condiciones de libertad: subraya el hecho que el trabajo debería ser libremente elegido y no llevado a cabo bajo condiciones forzosas.
        
     Significa además que las y los trabajadores tienen el derecho de participar en las actividades de los organismos sindicales, es decir de tener voz y representación.

•   Trabajo en condiciones de equidad: significa que es necesario que las personas trabajadoras sean tratadas de manera justa y equitativa, sin discriminaciones y permitiendo conciliar el trabajo con la familia.

·     Trabajo en condiciones de seguridad: se refiere a la necesidad de proteger la salud de los/as trabajadores/as, así como proveerles pensiones y protección social adecuadas.

•  Trabajo en condiciones de dignidad: requiere que todas las personas trabajadoras sean tratadas con respeto y puedan participar en las decisiones relativas a las condiciones laborales.

Todas estas necesidades y aspiraciones están interrelacionadas y está demostrado que existe un círculo virtuoso entre la calidad del trabajo y la calidad de vida.

También se sabe que la protección social, el diálogo social y el reconocimiento de los derechos fundamentales en el trabajo interactúan de forma positiva con la calidad del empleo y la generación de ingresos, mientras que la desigualdad afecta la calidad de vida de la gente, aumentando la pobreza y obstaculizando las mejoras en educación y salud.

Algunos ejemplos de trabajo no decente son: trabajo forzoso o en condiciones de esclavitud, contrato a destajo, pago por debajo del salario mínimo, despido por embarazo o maternidad, discriminaciones basadas en el género, la raza o etnia, la edad, etc.; condiciones que impidan conciliar las responsabilidades y necesidades del trabajo con las del cuidado personal y de la familia, etc.

1 comentario:

  1. Diferentes estudios han demostrado que un empleado/empleada motivada es más productivo.
    Es cuestión simplemente de aplicar criterios empresariales y como empresaria quiero lo mejor para mi empresa.
    Por lo tanto, si en mi planificación esta el desarrollo empresarial, con los consecuentes beneficios que ello genera, no puedo nunca olvidar las condiciones de trabajo y con ello reivindicar un trabajo digno para todos, empresarios y trabajadores.
    Para finalizar retomo la conclusión expuesta en el artículo anterior: “…En conclusión un trabajo decente, es aquel que nos permite satisfacer necesidades materiales (alimentación, salud, vivienda seguridad, descanso), necesidades culturales y sociales (educación, cultura, actividades de ocio, relaciones de amistades), de reconocimiento y autorrealización (confianza, respeto, satisfacción con la vida y los logros alcanzados)”

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